Murciélagos de la reserva silvestre El Bajo en Managua
En dos años de estudio mastozoológico en la reserva El Bajo, ubicada en el municipio de El Crucero en Managua, el maztozoologo, Arnulfo Médina Fitoria junto con los voluntarios de la Fundación Apapachoa y algunos jóvenes de la comunidad campesina de Santa Julia, han realizado cuatro muestreos o captura de mamíferos, entre ellos los murciélagos.
Los murciélagos son los únicos mamíferos estrictamente voladores que se conocen hasta ahora. Esa particularidad les otorga una función muy importante en los ecosistemas del mundo.
Medina Fitoria afirma que este estudio lo comenzó en mayo y septiembre de 2019, y ha continuado en marzo y agosto de este año. Durante los muestreos han contabilizado 342 individuos pertenecientes a tres familias y 22 especies de murciélagos.
Lea: Adolescentes encuentra un ave con una extraña mutación llamada leucismo.
“Esta riqueza representa el 20% del total de especies reportadas en el país”, asegura el experto. Del total de murciélagos capturados el 54.8% han sido hembras y el 45.2% machos.
Medina Fitoria explica que esta diversidad incluye 17 especies de Phyllostomidae (murciélagos lanceros), tres especies de Vespertilionidae (murciélagos vespertinos) y dos especies de Molossidae (murciélagos de cola libre).
Detalla que 11 especies son frugívoras, es decir que se alimentan de frutas, seis son insectívoras, tres nectarívoras y dos omnívoras. Las cinco especies más comunes fueron fruteros de los géneros Artibeus, Carollia y Dermanura, las cuales agruparon el 68.4% de las capturas, siendo la más abundante el murciélago frutero alilampiño (Artibeus jamaicensis), el cual concentró el 34.5% de los individuos.
Todos los murciélagos son importante, pero los murciélagos fruteros, tienen un rol protagónico, ya que ellos dispersan las semillas de los árboles con frutos, lo que ayuda restauración del bosque.
Especies raras
El investigador resalta que cinco de las especies son raras en la muestra con solo un individuo capturado, de las cuales una es nectarívora, el murciélago lengüilargo neotropical (Hylonycteris underwoodi), un murciélago endémico de Mesoamérica (sur de México y Centroamérica) y característico de los bosques húmedos del Caribe y muy raro en el Pacífico de Nicaragua.
Dos de estas especies poco comunes son insectívoras, el murciélago orejudo (micronycteris microtis) capturado en el bosque deciduo y el murciélago moloso centroamericano (Molossus pretiosus), una especie característica de los bosques secos y semideciduos del Pacífico del País. Los murciélagos insectívoros son grandes controladores de estos animales y mantienen el ecosistema saludable.
Medina Fitoria asegura que además, fueron raras dos especies de fruteros, el murciélago listado (Uroderma convexum), y el murciélago cariviejo (Centurio senex) un indicador de bosques conservados.
Reserva ideal para repreducirse
Aparentemente, los murciélagos de El Bajo, se reproducen satisfactoriamente. El experto menciona que un total de 52 individuos (15.2% del total), de 13 especies han sido encontrados en fase de reproducción, entre ellas 9 hembras preñadas, 35 hembras lactantes y 8 machos activos.
“Lo que indica que la reserva está proporcionando recursos básicos (principalmente alimento) en épocas críticas como es la época reproductiva”, afirma el investigador.
Medina Fitoria concluye que “la diversidad de murciélagos encontrados en la Reserva El Bajo, expresa mucho sobre la importancia de conservar sus bosques, los cuales son poco comunes en el Pacífico de Nicaragua, no solo por su importancia social en la producción de agua, sino también porque permiten albergar una rica biodiversidad”.